Swazilandia

Desayunamos estupendamente en nuestro original alojamiento. Pagamos los 630 r (43€) por un apartamento verdaderamente lujoso en un marco excepcional. Decidimos ir a visitar un complejo cultural con un poblado zulú y actuación folclórica de un grupo de cantantes y bailarines excepcionales. El poblado parece un montaje un poco artificial pero la actuación nos gusta mucho a pesar de la crítica de la guía. Los precios no se corresponden con lo que decían es bastante más barato sólo 100  r (7€) por lo que consideramos que vale verdaderamente la pena. Vemos  la cascada que está al lado del poblado.

Comemos en el restaurante del poblado que aunque el servicio es un poco malo la comida es correcta y el precio es muy económico 110 r (menos de cinco euros por cabeza). Nos vamos en coche hacia Sudáfrica cruzamos la frontera e iniciamos el periplo hacia Nelspruit. Hacemos caso al GPS del móvil que nos lleva por medio del monte durante 50 km por una carretera sin asfaltar. El camino se hace eterno, lleno de piedras, baches y vacas. 

A veces resulta verdaderamente angustioso... Piedras por todas partes y precipicios a cada lado. Al menos es de día y el camino es impresionante. Llegamos a las 6:30 al Bred & Breakfast donde nos dan una habitación enorme con seis camas. Salimos a cenar a la ciudad y comemos en el Oceans Basket, un restaurante de una cadena típica sudafricana. La cena nos cuesta 230 r (menos de 8 euros por barba) incluyendo una botella de vino blanco para los dos. Nos vamos a descansar al hotel.